lunes, 9 de marzo de 2015

¡Orgullo!

Mi reflexión:

Soy orgullosa de ser mujer desde que tengo uso de razón; una mujer auténtica, plena, fuerte, feliz, con ambiciones, metas y sueños.  Una mujer que como muchas, se ha tenido que enfrentar al machismo en los diferentes ámbitos y etapas de su vida.
Recuerdo desde niña como en casa se señalaba siempre la diferencia mujer-hombre y no entendía por qué mi madre, siendo también mujer, lo hacía. Y sí, a los seis años le cuestione a mi madre ¿por qué dices soy diferente a mis hermanos? y evidentemente lo único que respondió fue "porque son hombres, y ya". Indiscutiblemente se debía hacer lo que el hombre decía o quería sin importar si estaba bien o no, solo por ser "el hombre de la casa".
Al paso de los años, entiendo que a mi madre así la educaron, pero lo que no entiendo es porqué en la actualidad en muchos hogares continúa imperando el "machismo" y las mujeres siguen siendo objeto de maltrato y vejaciones, ni porqué lo siguen aceptando.  Lo digo porque lo veo en familias cercanas, como el de mis hermanos,  mi hermanas, vecinas, y más. ¿cómo pedir  respeten nuestros derechos, si nosotros mismas no lo hacemos?, para poder lograr un cambio, debemos empezar por respetar, creer y entender que somos mujeres, inteligentes, valiosas, con las mismas capacidades físicas e intelectuales  que el hombre.
Martha Dolores Peña Gordillo.
8 de marzo de 2015.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario